Coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer, que se celebra anualmente el 8 de marzo, se emite un sello conmemorativo que pone de relieve los avances realizados para conseguir la igualdad de la mujer en todas las esferas de la sociedad.
La idea de festejar el Día Internacional de la Mujer surgió a finales del siglo XIX, pero no se haría realidad hasta el XX, cuando las organizaciones internacionales comenzaron a proclamar una jornada de lucha en favor de la mujer y de sus derechos. Siguiendo esta idea, en 1910 se reunió en Copenhague la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas quien, con la aprobación por unanimidad de todas las asistentes, declaró el día de la mujer de carácter internacional.
El 19 de marzo de 1911 se celebró por primera vez el Día Internacional de la Mujer en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza, con mítines en los que se exigieron el derecho al voto, a ocupar cargos públicos, al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral. En 1913, las mujeres rusas celebraron su Día con movimientos en favor de la paz poco antes de la Primera Guerra Mundial. En 1917, ya en plena guerra, volvieron a movilizarse pidiendo “pan y paz”. Con sus reivindicaciones lograron el derecho al voto.
A lo largo de estos cien años, el movimiento del Día Internacional de la Mujer se ha visto reforzado por el apoyo de las Naciones Unidas y las cuatro conferencias celebradas en pro de los derechos de la mujer, de la igualdad, la justicia, el desarrollo y su participación en la vida política. La fecha oficial se estableció para el 8 de marzo.
No obstante, la situación de la mujer en gran parte del mundo sigue siendo discriminatoria con respecto al hombre, por lo que las instituciones internacionales continúan ahondando en la defensa de sus derechos.
En los países de la Unión Europea se trabaja intensamente en la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres. En España, en 2007, se promulgó una ley sobre este tema, que obliga a las empresas a adoptar medidas que eviten la discriminación. Para estimular y reconocer la labor de las empresas comprometidas con la Ley de Igualdad, se ha creado un distintivo que se concede a aquellas que destacan por la aplicación de la igualdad en el trabajo, en los modelos organizativos, en los servicios, productos y publicidad. Su lema: “Igualdad en la Empresa”, es el que se reproduce en el sello.