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La serie de sellos dedicada a Instrumentos musicales se ocupa de cuatro instrumentos, tres de cuerda pulsada como son la guitarra, el laúd y la mandolina,y uno de cuerda frotada como el violín.
La guitarra es un instrumento compuesto de caja de madera o de resonancia, de mástil sobre el que va adosado el diapasón, con un agujero acústico o boca en el centro y seis cuerdas. Sobre el diapasón van incrustados los trastes, que permiten las diferentes notas. Se conoce este instrumento como guitarra clásica o española y entre sus variedades figuran la guitarra acústica, flamenca, eléctrica y electroacústica.
El laúd es un instrumento parecido a la guitarra aunque con caja de resonancia abombada. Su boca se diferencia de la anterior por aparecer en forma de rosetón decorativo finamente tallado. Dentro de las variedades de laúd hallamos el árabe, el chino o pipa y el español que se introdujo en Europa desde Al-Ándalus en el período islámico.
La mandolina es un instrumento musical de cuatro cuerdas dobles y su caja de resonancia puede ser cóncava o plana. De procedencia italiana ha sido utilizado por muchos grandes compositores clásicos y por actuales, tanto para música tradicional como otros estilos. Entre sus variantes encontramos la mandolina italiana, folk y bluegrass.
El violín, instrumento de cuerda frotada, dispone de cuatro cuerdas afinadas por intervalos de quintas. Consta de una caja de resonancia, con elegantes formas ergonómicas, constituida por una tabla armónica y otra de fondo en madera de arce, además de las cubiertas laterales o aros. La tapa armónica tiene en el centro dos aberturas de resonancia llamadas oídos, eses o efes. Viene siendo utilizado en música clásica, folclórica y moderna.
